por Gerardo Allende Hernández
Aquí, en un sol sin oleajes que frecuento en las orillas de la mañana, sobre el agua espesa. Las aves emprenden vuelo entre sus cantos salvajes. Miro de lejos la pastura que felpea sus follajes bajo el ritmo de los vientos que no escucho. No me impacienta la calma, pero elijo llorar tinta para frotar el olvido. Pierdo el tiempo de regreso a la urbanidad que aturde. Pretendo que la ignoro, que ya navego en mí mismo, en aquel mundo posible en que todo es habitable tras el sonido del triste buitre que duerme.

Gerardo Allende Hernández. Capitalino de nacimiento, yucateco por convicción. Docente en la licenciatura de Letras y Literatura Moderna de la Universidad Modelo (Mérida). Miembro del Taller de Escritura Creativa del Centro Estatal de Bellas Artes de Yucatán.