traducción al español por Mario Bojórquez
7 ¿Hasta cuando serás un prisionero del color y del perfume? ¿Hasta cuando perseguirás todo lo horrible y lo bello? Si fuente del Zamzam tú fueras, o Agua de Vida, Al final serás hundido en el corazón de la tierra. 9 Del Eterno ni tú ni yo sabemos el Secreto Y este enigma del mundo ni yo ni tú lo conocemos. Nuestro encuentro fue cubierto por un velo Cuando caiga el velo, ni tú ni yo permaneceremos. 12 Aquellos que ahora son viejos y estos que son jóvenes todavía Uno por uno van persiguiendo su Venida. Y este viejísimo mundo a ninguno permite permanecer eterno. Vienen y van y otros vendrán y también se irán. 17 Es mejor huir del estudio y de toda ciencia Y colgarse de los rizos de una belleza. Antes que el tiempo vierta tu sangre, Es mejor que en la copa tú viertas la sangre de la jarra del vino. 26 Antes que tú o que yo, ya existían la noche y el día y la esfera celeste ya seguía su preciso curso. Mientras dure el día, posa gentil tu andar sobre el polvo, que la pupila de una bella muchacha ha sido antes. 29 ¿Por qué muda en cenizas aquel cuerpo nuestro que fue construido en sabiduría y armoniosa factura de miembros? Tantas bellas imágenes de bellas muchachas del mundo arden, y se convierten en tierra. ¿El humo a dónde va? 32 Es mejor pasar bebiendo el tiempo de la juventud, acompañados de delicioso vino y de un rostro esplendente. Esta Rueda que gira es solamente ruina, y sólo es desierto nuestra cabeza desierta de vino. 33 No hagas memoria del día transcurrido ni tus lágrimas pierdas por el mañana que viene: ni en el futuro ni en el pasado encontrarás sostén. Vive sólo el día de hoy y no pierdas al viento la vida 49 Como agua del arroyo y como viento de la llanura, un día más ha partido de mi vida y de la tuya. De cuanto vivamos, sólo dos días no habrán de entristecernos: el día que aún no ha llegado y aquel que ya pasó. 61 He visto el mundo y lo que he visto es nada. Nada es aquello que he dicho y he sentido. He elevado mi vista más allá del más alto horizonte y aquel quedarse en casa, aún eso, es nada.
Omar Khayyâm, Quartine, traducción del farsi al italiano Hafez Hajdar sobre la versión de Mohhamad’ Alî Forughî. La traducción al español, Mario Bojórquez.

Omar Khayyâm (Nishapur, actual Irán, 1048 – ibídem, 1131). Fue un matemático, astrónomo y poeta persa. Realizó observaciones astronómicas para la reforma del calendario, además de dirigir la construcción del observatorio de la ciudad de Isfahán. La fama de Khayyâm en Occidente se debe fundamentalmente a una colección de cuartetos.

Mario Bojórquez (1968). Poeta, ensayista y traductor. Es autor de Diván de Mouraria (1999), El deseo postergado (2007), Y2K (2009), Hablar sombras (2013) y Memorial de Ayotzinapa (2016). Sus primeros libros se reúnen en El rayo y la memoria (2012). Premio Nacional de Poesía Aguascalientes (2007) por El deseo postergado, Premio Bellas Artes de Ensayo Literario José Revueltas (2010) y recientemente el Premio Alhambra de Poesía Americana (2012).