ACORDES INCIERTOS
Me preguntaron alguna vez quién era mi musa,
será acaso:
¿Las sombras de tus lamentos?
¿La música del piano?
¿Las melodías del viejo saxofón?
¿O las partituras olvidadas en algún ensayo?
Y si las pesadillas rondan a medianoche,
tu música sabe cobijar esta extraña secuencia,
imaginando que alguna vez tocaste el trombón,
bajo el cielo gris,
abriendo paso a las nubes coposas de llanto
que se fruncieron solo por joder,
celosas de nuestra conexión,
y del pacto que firmaron nuestros cuerpos desnudos
en medio del placer.
Oigo tu canto,
heme aquí con inexactitud,
con melodías robadas que el viento no quiso compartir.
Y tus dedos se deslizan suavemente en cada cuerda,
en cada escala del mástil,
simulando paradas en los trastes.
Esta alianza musical nos asoma
en el crepúsculo detrás de las montañas,
bailando con el sonido de un piano,
y en medio del deseo,
mis ojos son tu voz.
CIELO INFINITO
¿Cuál es tu verdad corazón?
¿A qué temer, si en la jaula de nuestros encantos guardamos recuerdos de
terciopelo?
Deseando que los arrullos de las frescas noches de otoño
nos preparen para temples mañanas.
Mañanas que nos regalan algo más que ensueño,
ecos de la noche bañados de desconsuelo,
pedazos de nobleza,
raudos pilares que sostienen alguna barbarie,
alguna osadía no dicha,
alguna pregunta no respondida.
Y mi fuerza se desmorona
con una caricia,
con un detalle,
con una sonrisa.
Recordando que los pétalos de girasoles
los guardé en algún libro de Cortázar,
bañados en aromas de letras,
intentando ser Cronopios,
deseando conocer a la Maga,
aprendiendo a bailar con los Famas,
en un misterioso Cielo infinito.
HOMBRE DEL OCASO
Las pestañan hamacan las perlas
que resbalan titubeando en la verdad
y la brisa reposa
cuando la piel se agrieta
y la alberga en cada poro
exhumando el cuerpo
que apena esta tarde.
Afuera hay sol
pero en el alma; penumbra
y la noche reconforta
cuando alivia el llanto
y el anónimo nombre
se descompone en sílabas.
En el balcón, un reposo
y el hombre
tiene sed de miel,
tiene sed de amor
y tiene sed de piel.
Afuera hay sol
y el alma vuela en el ocaso
ondulando sombras,
y delineando la figura
en papel carbón.
La copa alzada
brinda con el cielo.
Primer sorbo
y el hombre entra en penitencia
confesando los amores
que guardó en silencio.
Acerca la copa,
el segundo sorbo
y las mentiras resbalan
con lentitud
dañando las cuerdas
que alguna vez
profesaron amor
cuando la desolada tarde
le regala verdades
y él desplaza caretas
y templa el corazón.
Acerca la copa,
tercer sorbo,
y él recuerda que su rostro
no es mentira,
que el color de la voz
no fue ilusión
y que los tibios senderos
se exploraron
con deseo y lentitud.
Afuera hay sol,
pero en el alma; penumbra
y las pestañan hamacan
las últimas perlas.
El hombre acerca la copa
y da el último sorbo,
brinda por las verdades
que conjetura
en desilusión.

Sandra Belen Ramírez Rossel, nació el 25 de agosto de 1986 en Bellavista- Callao, Perú. Es Técnica en Gerencia Hotelera con Excelencia (Cevatur-Perú). Es Escritora, Poeta y Narradora de cuentos infantiles.
Presentaciones en la Feria del Libro Ricardo Palma y en la FIL.
Participó en el Taller de Escritura Creativa (Editorial Autómata), publicada en Antologías Literarias, entre ellas: “Lima en Letras”, “Literal”, “Tiempos Modernos I y II”, Antología Poética “Palabras sin Fronteras. Fronteras sin Palabras” de la Universidad Ricardo Palma y de la Antología Poética Virtual “Aislados” (Dendro Ediciones).
Cursó el Taller Virtual “Introducción en el arte de contar cuentos” de la Fundación Chilena Mustakis. Talleres Virtuales Master class: “Introducción al doblaje” a cargo de Torre A Doblaje y del Taller Literario “Inducción al cuento” a cargo del escritor chileno Manuel Pozo, el Taller virtual “Técnicas Narrativas para libros Infantiles” a cargo de la comunidad creativa online Doméstika, y el Taller online de Introducción a la Escritura Creativa, a cargo de Javier Nicolás Santiago.
Autora del poemario “Insomnio de Luna Nueva” bajo el sello de la editorial chilena
Dialecto ediciones.